Según cuenta la leyenda, en la última noche de abril, las brujas alemanas vuelan para reunirse en Brocken, la cima más alta de las montañas del Harz, a fin de celebrar un ritual con el diablo y esperar a que llegue el verano. En Toledo que saben mucho de brujería y procesos inquisitoriales, entre otras cosas, Kink Jartur y sus Femur plastifican un álbum repleto de punk rock, garage primitivo y rock and roll de la vieja escuela. Canciones que se nutren de una abanico sonoro que va de Screamin’ Jay Hawkins a The Cramps. Sonidos de ultratumba totalmente adictivos que suenan dopados de fuzz, golpes y sudor como certifica la inaugural instrumental «Biker Run», pasando por «Cementerio Bop», el sicótico R&B de «Licor Café» o la lograda recreación del emblemático «Can’t Seem to Make You Mine» de The Seeds. El espíritu de Screaming Lord Sutch se paseó por «Negro y Espero» sin pasar por alto «Happy Halloween», un bombazo instrumental con tufo a The Ventures. Un aquelarre sonoro con letras que versan sobre licántropos, pildorazos contra la desidia juvenil y mucha fiesta. Quedas invitado/a.

Autor: Rafa García-Moreno