¡Cuánto más oigo aullar a estos dos lobos solitarios, más me enganchó a sus maquiavélicos sonidos y sus satánicas historias! Con sus garras afiladas y armas en ristre atacan a hipsters y hippies y aúllan sus enrevesadas historias a psicópatas, sociópatas, aliens, Godzillas, yetis y monstruos del pantano como ellos. Vienen desde los más nevados y oscuros montes suizos con su rock’n’roll arcaico y salvaje también con destellos del punk gótico y aromas americanos, pero más bien opresivos. No les importa definirse a sí mismos con la muy apropiada etiqueta de “Trash’n’Roll”, que les va de puta madre, por cierto.

Se formaron en 2011 ya con instinto cazador y con ganas de sangre. No les pude conocer cuando publicaron su debut pero me dejaron impactado hace poco más de dos años con una estupenda reválida titulada “The Cryptid Zoo” en la que a los 2 Mister Wolf les ayudaron para redondear y proporcionar variados arreglos a los 14 mutantes temas unos cuantos amigos con buen gusto. Combinaban así boogie-rock a lo ZZ Top, country-boogie-punk con el banjo de Blind Banjo Aregger, punkabilly veloz, punk zíngaro a toda pastilla (‘Tuzemak’), estribillos beodos, recuerdos al ‘Rock This Town’ de los Stray Cats, percusiones de excitante exótica, historias y ritmos truculentos a lo Screamin’ Jay Hawkins, valses góticos con trombón entre Slim Cessna’s Auto Club y Nick Cave y hasta violentas guitarras con marca Jon Spencer Blues Explosion.

Y por ahí siguen en este tercer y espectacular trabajo titulado “Metamorphosis” (Lux Noise Records). No te dejes engañar por su título pues siguen con esas mismas coordenadas y hasta con algunos momentos más oscuros con voces que se escuchan en la distancia al estilo d eThe Residents. De hecho en esta ocasión hasta cuentan con la muy especial colaboración de Dieter Meier. Sí es el fundador de los míticos Yello con su techno y música electrónica experimental junto a quien reinterpretan un ‘Fat Fly’ que fue lógicamente un adelantado primer single. Más oscura y con guitarras locas parecen acercarse hasta a los primeros The Fall. No se pierde la magia de un estribillo para corear. 

Pero antes de eso venden ya su alma al diablo desde el arranque con un ‘Lucifer’ de oscuridad cavernícola, con cuerdas alucinadas, dos desquiciadas voces y delicioso banjo. Experimentales y oxidados en ‘I Was Wrong’ y desatados a toda pastilla, casi como nuestros Dead Bronco, en otro gran single titulado ‘Klaus’. En ‘Count Vlad’ ya sabes a quien cantan. Reclaman y consiguen más sangre con y sin dinero. ‘Dark Night’ es un fascinante y gótico lento a lo Slim Cessna’s Auto Club. Más historias diabólicas en ‘I Crushed The Devil’. Trompeta infernal y voz truculenta entre Alice Cooper y Screamin’ Jay Hawkins en una ‘She’s A Threat’ que puede enganchar también a fans de los primeros The Cramps o del más oscuro Tom Waits. Ten cuidado con sus nanas góticas como ‘Tiger Time’. Se despiden con ‘Time To Say Goodbye’ y banjo y ritmo saltarín y nos dejan con las ganas de “Time to say hello”, porque nos encantaría que regresaran pronto por aquí en lugar de tocar tanto por tierras más vampíricas como el centro de Europa o el Japón de Godzilla. ¡Ten cuidado no te chupen la sangre cuando vuelvan a tocar entre nosotros porque en directo son aún más terroríficos!

Autor: Txema Mañeru