Tras veinticinco años en la música la banda valenciana Doctor Divago presenta su décimo disco, Imperio. Un nombre sonoro con el que homenajear haber llegado tan lejos. En esta entrevista para Sonicwavemagazine hablaron de la música y las musas que les han guiado hasta este 7 de diciembre, fecha de presentación del nuevo trabajo.

Imperio es el número diez de una dilatada carrera musical. Tras esta trayectoria ¿dónde saca fuerzas vuestro Imperio para seguir adelante, de la música, de vuestro público o de las subvenciones y apoyo del gobierno?
Jaja, del apoyo del gobierno local sobre todo… Pues somos gente entusiasta y vital, que creemos en lo que hacemos, tenemos un alto compromiso con nosotros mismos, con muestra música y con nuestro público. Y por eso seguimos subiéndonos a los escenarios y sacando discos, porque ésa es nuestra vida, vivimos para  la música.  

Este disco es muy versátil, se puede hablar de un estilo predominante, el rock, si a la vez se mencionan las mil influencias que lo rodean. A la hora de componer y montar un tema ¿cómo decidís cuál será el de cada uno?
Siempre intentamos que nuestros discos sean versátiles dentro del estilo que seguimos, sin dispersarnos. Hay una dualidad muy básica, ya desde la propia composición, de canciones más energéticas y otras más intimistas. A partir de ahí a la hora de arreglarlas pensamos siempre en lo que nos pide cada canción, que puede ser más melódica o más cruda, con más distorsión o más acústica; también depende de lo que nos pida el cuerpo en el local de ensayo. A veces aceleramos los tempos o cambiamos tonos originales para quedarnos lo más a gusto posible con el resultado. Casi siempre, sobre todo en los últimos años, intentamos que el sonido de directo y de estudio sean lo más parecidos posible.

Hablando de diferentes estilos, ¿qué tiene el rock que no tenga el pop y viceversa?
¿Se supone que el pop tiene más que ver con la melodía y el rock con la distorsión? ¿O algo así? Depende de la visión que quieras aplicar o el acercamiento que tengas. Tal como lo veo yo, no encuentro mucha diferencia, en el sentido de que el rock que practicamos tiene mucha melodía que se puede considerar pop. Y para mí pop puede ser Syd Barrett o Nick Lowe, que indiscutiblemente también son rock, como le pasa también a Nacha Pop o a Los Brincos en España. Por otra parte, sentimos debilidad por este tipo de grupos que son las dos cosas, hay muchos. Supongo que Los Beatles serían el ejemplo paradigmático y Buddy Holly el más claro. Soy consciente de que la visión más extendida es que rock es Extremoduro (que sería sólo una parte del rock) y pop Marta Sánchez, que me parece una visión muy simplista, y cuando yo digo pop estoy hablando de otra cosa. Quizá mi visión sobre lo que es el pop tenga un sesgo rockero.  Rock’n’roll, rock y música pop para mí son sinónimos buena parte del tiempo; sabiendo que la música pop es algo más extenso. Ya, es un poco lío y no pretendo convencer a nadie de nada, es mi visión.

Habladnos de los elementos que os distinguen musicalmente hablando, esos que os dan una originalidad especial, como los cambios de ritmo y la contención de “Sonaba Julio Galcerá” o las armonías de “Ni una pizca de tu amor”.
Bueno, aparte de ésos que citas, un elemento clave, sin duda, es la presencia de armónica, con un armonicista fijo en la banda desde siempre, en un estilo que no es ni blues ni rhytm&blues ni country aunque a veces aporte ese toque. Y supongo que la voz, y cada uno de los instrumentos, llegan a distinguirnos también. La gente que nos conoce, cuando nos oye, nos reconoce a la primera. Todo eso junto a las letras, la vertiente lírica que también nos define, es un todo que nos hace diferentes a otros grupos.

Las letras son un homenaje a personajes y realidades cotidianas, ¿son fuente de inspiración o compromiso con la sociedad?
Siempre se plasma un compromiso o una forma de ver la vida a través de lo que se escribe, es inevitable. El hecho de homenajear a unos determinados personajes o utilizar determinados referentes te posiciona. Pero no escribo conscientemente planteándome un mensaje único y concreto ni dirigido a nadie en particular. Escribo más bien desde el interior, a veces incluso sin sentido consciente, como expresión de emociones que se pueden compartir, con la pretensión de que las letras tengan peso, un buen equilibrio con la música, que sean sugerentes y aporten belleza.

¿Cómo concebís la guitarra y la batería, tan presentes y trabajadas en Imperio?
Para la guitarra solista utilizamos los pedales hechos a mano que fabrica nuestro guitarra David, Vie pedals. Nos gustan los sonidos añejos, con calor. Y con las baterías, como con todos los arreglos, hacemos también un trabajo de mucho curro, muchas horas de local de ensayo, a pesar de que es un instrumento de base, y a veces para decidir que menos es más. A la hora de grabar se cuida mucho el sonido de la batería también. Wally trabaja con Santafe drumms, una marca de baterías custom en función de las especificaciones del cliente, construidas de forma totalmente artesanal. En cualquier caso, a pesar del cuidado de su calidad y del brillo de algunos arreglos, todos los instrumentos están al servicio de la canción, así los concebimos, y normalmente al servicio de lo que define la canción, que suele ser la voz.

Uno de vosotros, el armónica Antonio H. Chumillas, “Chumi”, ha hecho la portada, ¿cómo surgió la idea?

Chumi es ilustrador. Se ha encargado de las portadas de los últimos cuatro trabajos larga duración del grupo, aparte de cartelería y demás. Se podría decir que las últimas portadas son una serie de ilustraciones. Casi siempre plantea las portadas basándose en cosas que cuentan las letras. En este caso creo recordar que fue una sugerencia mía, pero para componer esta portada Chumi cogió elementos de la canción “Gracia Imperio”, dedicada a una vedette que trabajó mucho en la Valencia de los 50 y que murió en nuestro barrio en circunstancias nunca aclaradas y de “La deriva continental”, en la que aparece el supercontinente original Pangea.

Por cierto, ¿a qué hace referencia el título Imperio?
Pues hace referencia al apellido artístico de la vedette de la que habla la segunda canción del disco y también lo aprovechamos para hacer un juego divertido con el título, un autohomenaje a nuestro propio imperio artístico, con un sano punto irónico incluso. A pesar de que no somos emperadores de nada y de que no estamos en las listas de éxitos, tenemos ese imperio musical y artístico propio y particular, del que hablábamos antes, que nos apetecía poner de relieve en la portada. Le sentaba bien como título al décimo álbum de esta banda que lleva tantos años en activo. La idea del título, a raíz de las conversaciones para la portada, fue de Chumi, por cierto.

Bonavena música, discográfica propia con la que publicáis el disco, ¿cómo surgió la idea en plena era digital?
Bueno, también trabajamos el mundo digital desde Bonavena, aunque seguimos sacando formato físico, sí, pero bastante integrados en la era digital. Bonavena Música es un sello que hemos creado entre Raúl Tamarit, cantante de Los Radiadores, y Manolo Bertrán, el de Doctor Divago, para sacar la música de estos dos grupos. A lo largo de nuestra trayectoria, hemos tenido experiencias con sellos diversos y hemos llegado a convencernos de que lo nuestro nadie lo va a cuidar como nosotros. Y unos cuantos meses de actividad nos están dando la razón. Estamos abiertos a otras actividades, no sólo las de sello discográfico, que iremos desarrollando en el futuro.

Tras vuestra dilatada carrera musical me gustaría preguntaros, ¿en qué notan los músicos la subida del IVA en la cultura?
Pues lo notamos como músicos, puesto que hacemos conciertos y ponemos discos a la venta, etc., por ejemplo, y en muchos otros efectos colaterales. Y también como disfrutadores de cultura que somos. Tal como están ahora las cosas, la cultura, ir a un concierto, entrar en un museo, ir al teatro, al cine, se considera un lujo. Y no lo es;  para muchos es una necesidad. 

Autor: Esther Martín