Entrevistas
04-02-2020
Deadyard, grasientos y lubricados
El pasado 16 de enero salió al mercado el primer larga duración de los barceloneses Deadyard, después de la gran repercusión que tuvo su ep de debut. Este toma cuerpo en nueve pepinazos que han de hacer mella en cualquier aficonado al high energy grasientamente lubricado con melodías que se pegan al subsconsciente, bien en su formato de himnos a los gloriosos años cercanos al 77, o en desarrollos más alambicados que nos sumergen en escenas de paranoia psicodélica, que ilustra más que bien la portada de este vitaminado primer paso. Este país siempre ha sido terreno fértil donde han cuajado a la perfección las semillas sembradas por formaciones como Supersukers o Hellacopters, y a estas nutritivas influencias los Barna City Five acoplan su foribunda personalidad. El año empieza hiper revolucionado...
Hubo una gran acogida a vuestro debut con el EP The Monkey Monggah, y no habéis tardado mucho en darle continuidad, ¿ya teníais los nuevos temas preparados?
Marc: algunos si, otro no, más o menos la mitad del álbum lo fuimos incorporando al directo progresivamente hasta el momento de centrarnos ya en el nuevo disco. Ya sabes, en este punto de la banda nos hacía falta temas para el directo, el EP solo tiene 6!
Vamos a comenzar a analizar el disco desde la portada, ¿quién es el monstruo y quién el pobre aniquilado por su mirada? Es una ilustración que trae a la mente films como El Increíble Hombre Menguante… una portada tremendamente barroca, por cierto
Carlos: Lo que pasó es que andaba despistado pensando en mis cosas y para cuando quise darme cuenta el rayo fotónico ese ya me había alcanzado. El monstruo es el producto de la fértil imaginación de Guillem Bosch, que es el responsable de todo el artwork. Aunque nunca se sabe.
¿Esa apocalíptica visión que refleja la portada es aplicable al mundo de la música o a todo el entorno en que nos movemos?
Marc: nada, tan solo es un bicho que persigue gente y dispara rayos, rollo serie B, nos molaba esa estética. Por otro lado, no es la mejor época de la historia para música como la nuestra, ni estamos en el mejor lugar, pero nadie nos va a quitar las ganas de desbarrar.
Habéis optado por Gorka Dresbaj como productor, un técnico habituado a trabajar una amplia variedad de estilos, muchos de ellos alejados de vuestros planteamientos, ¿que os decidió a elegirlo?
Carlos: Rau ya había trabajado con Gorka en el pasado, con ‘77 y como la experiencia fue muy positiva, tampoco costó mucho tomar la decisión. Nos encajó por muchos motivos y ahora visto el resultado, creemos que ha sido un acierto. Sin duda Gorka es un 10.
No sé si definirlo como seña de identidad, dado que como Deadyard estáis en vuestros inicios, pero nunca descuidáis la melodía por anfetamínico que sea el ritmo de la canción
Carlos: Eso es verdad, es la forma de hacer de Pablo. Creo que tiene un don para las melodías, le salen de manera fácil.
En este sentido en “Armageddon It” se aprecia, en cuanto a la secuenciación de los temas una suerte de work in progress, en el sentido de que vais de los temas más inmediatos a los que son más ricos en arreglos, no sé si ha sido una decisión meditada o mera casualidad
Carlos: El orden de los temas en un disco no es algo que dejas al azar, aunque no seguimos un patrón determinado, este no es un disco conceptual. Le das unas vueltas y entre todos decidimos un orden y poco más. Normalmente sueles tener claro con qué tema quieres abrir y ese te va llevando al siguiente y así sucesivamente.
Marc: Lo que si tenemos presente es que hay cara A y B.
Siguiendo con la pregunta anterior, arrancáis absolutamente a tumba abierta, con “The Escapist Song” y el tema que titula el disco, dos canciones que recomendáis como single, ¿quizás por que son las que mejor representan la filosofía de la banda?
Marc: cada canción representa a la banda, son facetas diferentes de la misma, por eso están ahí. Depende de nuestro estado en el momento de crearlas tienen una atmósfera u otra, es algo que tan solo pasa así, simplemente crees que mola y avanzas con la idea. Y como banda es más divertido, nadie se aburre y todos tenemos nuestro sello más personal en algún momento u otro.
Xavi: Si, no le hacemos ascos a nada. Si nos gusta...¡adelante! Lo que tenemos claro es lo que no nos gusta, eso seguro.
De los temas más rock and roll destacaría “Black Hole Fun”, donde lográis una simbiosis entre la visceralidad punk y unos guitarrazos muy AC/DC
Carlos:Quizá sea el tema junto con "Repo Men" más espontáneo del disco, prácticamente sale de una improvisación en el local a partir de un riff que había sacado momentos antes de que llegara el resto de la banda. Y lo mismo pasó con "Repo Men", que es parte de un tema que habíamos desechado y que llevamos hacia un lado completamente diferente, lo probamos una sola vez en el local, se grabó con un móvil, y ya no volvimos a tocarla hasta que la grabamos.
Xavi: Lo más AC/DC está en la letra (Risas)
Y por fin la traca final con la sorprendente “Repo Men”, siniestra, casi psicodélica y muy rica en arreglos, quizás el tema que más se aleja de lo que en principio se puede esperar de Deadyard…
Marc: ya.. bueno, está bien, todo es música, estados de ánimo, diferentes puntos de vista. Es un cierre, puedes hacer fiesta, o resaca. En este caso hemos cerrado el disco con una gran resaca (Risas)
¿Como os planteáis los conciertos de presentación del disco, tocaréis todos vuestros temas o echaréis mano de alguna versión para completar el set?
Xavi: Ya hace tiempo que tenemos muchas ganas de tocar los nuevos temas en directo! De hecho ya venimos tirando de ellos en algún concierto pero hay algunos que nunca han subido al escenario. Tema versiones, veremos... está por ver.
Autor: Manuel Borrero